La villa, construida en 1978 en estilo mallorquín sobre una parcela de 600 m², cautiva por su encanto mediterráneo, un tranquilo jardín con árboles frutales, zona de barbacoa y una hermosa vista parcial al mar desde el balcón. La villa está situada a sólo 100 metros de la costa y tiene una superficie habitable de 200 m² distribuida en 2 plantas.

Distribución:

El sótano:

Pequeño taller/almacén con techos de 180 m de altura y una cámara de flujo para la circulación del aire. Cisterna de 3 cámaras para aguas residuales.

PLANTA BAJA:

Entrada, vestíbulo, un amplio salón con zona de comedor y cocina independiente totalmente equipada y acceso a la veranda y al jardín con una piscina de 7m x 5,5m y zona de barbacoa/cocina exterior, 3 dormitorios dobles, 2 baños.

1OG:

Piso independiente con salón, baño en suite y un dormitorio doble con acceso al balcón y vistas parciales al mar. Existe una preinstalación para una cocina americana.